"En el segundo trimestre de este año, la población activa --que son aquellas personas de 16 a 64 años en disposición de trabajar, tengan o no un empleo-- cayó un 1%, lo que supuso que durante ese periodo más de 232.000 personas dejaron de pertenecer a este colectivo ¿Cuál fue el motivo de esa repentina desaparición?
Los datos oficiales analizados por el último informe de la patronal de las grandes empresas de trabajo temporal, Asempleo, reflejan que prácticamente la totalidad de esta caída de la población activa se debe a la desaparición de jóvenes entre 25 y 35 años, que disminuyen un 5,2% en comparación con el segundo trimestre de 2013.
Es más, el adelgazamiento de este colectivo en disposición de trabajar no se produce, como podría pensarse en un principio, porque estas personas pasen a la inactividad por seguir formándose o por estar desanimados por no encontrar empleo ya que estos solo representan el 0,7% del ajuste. El motivo fundamental es el éxodo masivo de estos jóvenes al extranjero en busca de oportunidades laborales. Así, se registró una disminución de este segmento poblacional del 5,5% anual.
Ante esta situación, Asempleo advierte que si este proceso de fuga de jóvenes tiene continuidad en los próximos meses "esto podría llegar a suponer una descapitalización de la economía española, clave en el proceso de recuperación de la actividad productiva".
¿Qué tipo de jóvenes se están marchando? La última radiografia aportada por la EPA indica que el perfíl de aquellos que emigran se reparte a partes iguales entre hombres y mujeres. Son mayoría los extranjeros casados que vuelven a sus lugares de origen o se marcha a un tercer país. Aunque las ETT llaman la atención acerca de que "cada vez adquieren más protagonismo los solteros españoles que optan por probar suerte fuera".
Según este análisis, la decisión de estos jóvennes de marcharse a otros países esconde no solo situaciones de desempleo prolongadas sino también muchos casos en los que la persona tiene empleo pero ocupan un puesto de trabajo que requiere mucho menor nivel de formación que el que ellos tienen. Este fenómeno de la sobrecualificación laboral afecta al 57,4% de los trabajadores entre 25 y 35 años en la actualidad, el porcentaje más alto de todos los rangos de edad."
Los datos oficiales analizados por el último informe de la patronal de las grandes empresas de trabajo temporal, Asempleo, reflejan que prácticamente la totalidad de esta caída de la población activa se debe a la desaparición de jóvenes entre 25 y 35 años, que disminuyen un 5,2% en comparación con el segundo trimestre de 2013.
Es más, el adelgazamiento de este colectivo en disposición de trabajar no se produce, como podría pensarse en un principio, porque estas personas pasen a la inactividad por seguir formándose o por estar desanimados por no encontrar empleo ya que estos solo representan el 0,7% del ajuste. El motivo fundamental es el éxodo masivo de estos jóvenes al extranjero en busca de oportunidades laborales. Así, se registró una disminución de este segmento poblacional del 5,5% anual.
Ante esta situación, Asempleo advierte que si este proceso de fuga de jóvenes tiene continuidad en los próximos meses "esto podría llegar a suponer una descapitalización de la economía española, clave en el proceso de recuperación de la actividad productiva".
¿Qué tipo de jóvenes se están marchando? La última radiografia aportada por la EPA indica que el perfíl de aquellos que emigran se reparte a partes iguales entre hombres y mujeres. Son mayoría los extranjeros casados que vuelven a sus lugares de origen o se marcha a un tercer país. Aunque las ETT llaman la atención acerca de que "cada vez adquieren más protagonismo los solteros españoles que optan por probar suerte fuera".
Según este análisis, la decisión de estos jóvennes de marcharse a otros países esconde no solo situaciones de desempleo prolongadas sino también muchos casos en los que la persona tiene empleo pero ocupan un puesto de trabajo que requiere mucho menor nivel de formación que el que ellos tienen. Este fenómeno de la sobrecualificación laboral afecta al 57,4% de los trabajadores entre 25 y 35 años en la actualidad, el porcentaje más alto de todos los rangos de edad."
Lo que no señalan en su informe es que, además de la falta de trabajo o la falta de alternativas de trabajo más cualificado, los jóvenes también buscan empleos con mayor estabilidad laboral. Algo que, evidentemente, la patronal de las ETT no van a reconocer porque estas empresas son la principal suministradora de empleo temporal a las grandes empresas, con contratos incluso de uno o dos días.
También resulta llamativo que a pesar de reflejar esta realidad y mostrar su preocupación, estos empresarios no hagan ninguna propuesta para cambiar la situación. Sobre todo porque al mismo tiempo siguen apoyando las medidas restrictivas y de recorte que desarrolla el Gobierno y que son la causa principal del deterioro del empleo entre los jóvenes.